En Bonsái, ni la técnica, ni las reglas ni, incluso el diseño, es mas importante que la materia prima con la que trabajamos, es decir el árbol, ese ser vivo que apenas conocemos cosas de él y de su transformación desde semilla hasta la materia que tenemos para trabajar. La madera (el árbol) nos acompaña desde nuestro nacimiento (cuna) hasta nuestra muerte (ataúd) pasando por darnos cobijo en verano con su sombra, alimento con sus frutos y el hogar con su madera